La 58ª Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer insta a todos los países a proteger los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres

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Entre las conclusiones obtenidas de los debates y aportaciones de la CSW de 2014, se ha hecho un especial énfasis en la necesidad de “velar por la promoción y protección de los derechos humanos de todas las mujeres, sus derechos sexuales y la salud reproductiva y los derechos reproductivos. Además, entre otras necesidades, destaca el llamamiento a garantizar la educación de las mujeres y niñas en todo el mundo.

La CSW promueve desde 1946 los derechos femeninos y la igualdad de género en el mundo.

La 58ª Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer fue celebrada del 10 al 21 de marzo en la sede Naciones Unidas. En el informe del Secretario General de la ONU ya se destacaba las desigualdades crecientes con el pretexto de la crisis económica, así como la dificultad para mantener los derechos sexuales y reproductivos.

De esta manera, la Comisión ha alertado del “número de muertes maternas prevenibles” y las “importantes lagunas en la financiación” de los servicios de salud sexual y reproductiva, incluyendo la anticoncepción y los” servicios para las complicaciones del aborto inseguro y el aborto seguro”

Entre los documentos preparatorios de la Comisión, se encontraban declaraciones del Centro de los Derechos Reproductivos (entidad conocida por el mapa de las legislacions de aborto) o la Women’s Global Network for Reproductive Rights, con el fin que los Estados aborden “específicamente las barreras a las que se enfrentan las mujeres para acceder a los servicios de salud reproductiva”. Estas situaciones de dificultad en el ejercicio de la libertad sexual y reproductiva constituyen a su jucio, “una violación del derecho de la mujer a la igualdad”

Entre las propuestas, reivindican la “despenalización del aborto”, es decir, la “eliminación de todas las barreras jurídicas y de aplicación para garantizar unos procedimientos de interrupción del embarazo seguros, integrales, libres y de alta calidad, sin necesidad de consentimiento paterno o del cónyuge”

Asimismo reivindican el derecho “al placer, al acceso de los jóvenes a los anticonceptivos, a la orientación sexual y a la identidad sexual, sobre todo de los grupos más vulnerables, como mujeres, jóvenes, trabajadores sexuales, lesbianas, gays, bisexuales y trans.”

Apertura de la CSW 58. Foto: UN Women/Ryan Brown

En el mismo sentido de refirió la Ministra de los Derechos de las Mujeres de la República Francesa, Najat Vallaud Belkacem en que “cuanto más amanezado se siente el sistema patriarcal, más opresivo se hace” y que “por ello está particularmente interesado en quitar la libertad de las mujeres, y sobre todo su libertad en el ámbito sexual.”

Najat Vallaud Belkacem destacó que la libertad y los derechos sexuales y reproductivos “son la fuente de empoderamiento de todas las mujeres” y “deben ser protegidos en todas partes”

La representante francesa recalcó que “es hora de que la comunidad internacional proporcione el acceso universal a la planificación familiar, a un aborto seguro y la educación sexual”, dedicando todos los recursos necesarios.

En su exposición sobre estos derechos, incidió en que suponen que “mujeres y hombres tomen decisiones libres, informadas y responsables sobre sus vidas” y hacer “que las niñas no mueran en el parto, que finalmente permitan a las mujeres vivir sin miedo, decidir el número de hijos, el acceso a la educación , el conocimiento, el trabajo, las responsabilidades, y así contribuir al desarrollo y al progreso social de sus países”